Eje Cafetero

Pensar en café es pensar en Colombia: grandes y verdes montañas surcadas por mulas y carros pintorescos cargados de bultos de café. Fincas coloridas donde los pájaros dan los buenos días complementan el hermoso paisaje cultural cafetero, patrimonio cultural de la humanidad. Y así es el eje cafetero, región colombiana del centro del país conformada por los departamentos de Quindío, Caldas y Risaralda. Territorios donde un gran almuerzo es gesto de gran amabilidad con el visitante y donde los atardeceres detienen el tiempo para dejarlos grabados en la memoria mientras se toma otra taza del mejor café del mundo.
Fincas coloridas donde los pájaros dan los buenos días, donde un almuerzo es la mayor muestra de amabilidad con el visitante y donde el verde de las montañas solo se interrumpe con el pasar de carros pintorescos cargados de bultos de café son la señal inconfundible de estar en el eje cafetero, un paisaje único patrimonio cultural de la humanidad. Esta región del centro de Colombia, conformada por los departamentos de Caldas, Quindío y Risaralda es la máxima definición de lo que es tomarse una taza del mejor café del mundo mientras se aprecian atardeceres que quitan el aliento.
El eje cafetero es una región colombiana del centro del país conformada por los departamentos de Quindío, Caldas y Risaralda, territorios donde un gran almuerzo es gesto de gran amabilidad con el visitante y donde los atardeceres detienen el tiempo para dejarlos grabados en la memoria mientras se toma una taza del mejor café del mundo. Esa que es posible gracias a las verdes montañas cargadas de árboles de las que bajan mulas y carros pintorescos cargados con bultos que viajarán por el mundo llevando el dulce sabor del café colombiano.